Hugo Moyano: reivindicaciones legítimas y política patronal
Fecha: Jueves 28 de junio de 2012
Por: Ruth Werner
Mirá videos de las movilizaciones del miércoles 27/6 en TvPTS
El 27 de junio la Plaza de Mayo fue ganada por una masiva concurrencia de trabajadores que participaron del acto de Hugo Moyano pese al boicot del gobierno y del resto de la burocracia sindical. Los que ganaron la plaza fueron en su mayoría del gremio camionero, cuyos afiliados aprovecharon el paro general de su sindicato y viajaron desde todas las provincias. Junto a ellos participaron delegaciones de los gremios afines al moyanismo. Entre otros, se destacaron los trabajadores de Peajes, Judiciales, Aceiteros, Municipales de Capital, Canillitas y los maestros de la FEB. También se vieron a los sindicatos de la CGT Azul y Blanca de Barrionuevo y la UATRE del "Momo" Venegas.
Fue la primera manifestación obrera masiva contra el gobierno kirchnerista y que levanta reclamos progresivos: contra el impuesto al salario y los topes a las asignaciones familiares. Por eso, el sindicalismo clasista, el PTS y el PO, nos hicimos presentes en la Plaza con una importante columna común y nuestras propias banderas (ver páginas 3 y 4). Fuimos a exigir un plan de lucha nacional, no sólo por las reivindicaciones convocantes sino por los reclamos de toda la clase obrera. Por paritarias libres y sin techo, por un salario equivalente al costo de la canasta familiar; la abolición del trabajo en negro y precario y por el pase a planta de todos los trabajadores contratados. Estas consignas estuvieron ausentes en el llamado de Moyano, cuyo gremio fundamental, Camioneros, levantó en la semana previa a la marcha su propio plan de lucha para firmar en paritarias un 25,5% en tres cuotas (19% anualizado), un porcentaje incluso menor a lo conseguido por otros sindicatos burocráticos.
Jugando en la interna peronista
El discurso de Hugo Moyano en Plaza de Mayo combinó el reclamo por legítimas reivindicaciones obreras, con variadas alusiones a frases de Juan Domingo Perón para impactar deliberadamente en sectores del PJ, descontentos con el kirchnerismo. No sólo se opuso al impuesto al salario y a los topes a las asignaciones familiares sino que, en un hecho inédito (ya que acostumbra de manera corporativa a referirse sólo a los trabajadores en blanco), denunció el trabajo en negro que existe hasta en el Ministerio de Trabajo. También planteó la nacionalización del Banco Hipotecario para otorgar viviendas a los sin techo. Una "avivada" para adelantarse al gobierno, consideraron algunos medios, ya que el gobierno tenía esta medida "en carpeta". Sin embargo, el jefe de la CGT no planteó la continuidad de medidas de lucha para que estas reivindicaciones puedan transformarse en una realidad. Su objetivo es otro y opuesto a los intereses obreros: jugar en la interna del peronismo.
El Perón que Moyano reivindicó fue el del Gran Acuerdo Nacional, el que se abrazó con el radical Balbín en Gaspar Campos en 1972. Era la antesala del Pacto Social que en 1973, luego de las elecciones que consagraron al peronismo en el gobierno, congelaría los salarios, prohibiría las huelgas y le pegaría duro a la vanguardia obrera. "Basta de antiperonismo" dijo Balbín en ese encuentro. "Yo con Balbín voy a cualquier lado", contestó Perón. Sabemos cómo concluyó la convulsionada década del '70: con Perón dando vía libre a la Triple A y con la UCR golpeando la puerta de los cuarteles dando inicio a la dictadura genocida.
El discurso de Moyano estuvo hecho a la medida del ex menemista Daniel Scioli, quien se postuló recientemente como presidenciable. El jefe sindical buscó también endulzar los oídos de la derecha peronista y la oposición política y mediática patronal. La pelea entre Moyano y CFK está lanzada: "Ella se va a quedar porque nosotros no somos golpistas" y "yo voy a renovar el mandato el 12 de julio y voy a seguir en la CGT", desafió el camionero.
Discurso antiobrero de CFK
Cristina Kirchner respondió a la convocatoria de Moyano como hace todo gobierno patronal cuando la clase trabajadora aparece en el escenario político. Primero sacó a relucir el Código Penal, después dejó de lado todo rasgo progresista y acusó a un sector de trabajadores de UOCRA de Cerro Dragón por la muerte de nueve gendarmes en un accidente; denunció al paro nacional camionero y a la movilización como destituyentes; y por último, para justificar el reaccionario impuesto al salario, inventó una ridícula teoría de la distribución de la renta nacional. Ahora en el "fifty fifty" kirchnerista desaparecen los empresarios y la "torta" debe repartirse entre supuestos trabajadores ricos que ganan más de $5782 que deben ser "solidarios" con trabajadores más pobres (ver página 7). La presidenta no es original. Estos dichos y hechos los empleaba Alfonsín contra Ubaldini en los '80 y eran parte del gorilismo antisindical de la Alianza de los radicales y el FREPASO.
Ahora los medios K repiten que el paro y las movilizaciones fueron un fracaso. El fracaso del kirchnerismo es creer que podía, con La Cámpora y el bonapartismo de la "caja" contener la "interna" peronista, que está más desatada que nunca. Fracasó también su ambición de amedrentar a los trabajadores para que acepten dócilmente sus órdenes y no movilicen.
Asamblea Nacional Clasista e independencia política
Si la interna por la sucesión de Cristina se va a jugar en la calle, con la CGT dividida, con una pronunciada desaceleración y con la crisis mundial a las puertas de Argentina, más temprano que tarde el escenario político puede convulsionarse. Para ver hacia dónde se orientarán los acontecimientos será clave la capacidad de la clase trabajadora para responder a los ataques para que la crisis la paguen los capitalistas.
Moyano, como buen burócrata, no quiere jugar con la acción directa. Su objetivo en Plaza de Mayo fue hacer un pronunciamiento esencialmente político. Por eso, antes de largar la movilización levantó el plan de lucha camionero, que venía parando distintas ramas. Prefirió dejar de reclamar el 30% de aumento, contra los intereses de los afiliados de su principal sindicato, antes que abrir una crisis política nacional. Si no levantaba, la reapertura de paritarias contra los techos salariales podía transformarse en bandera de lucha para toda la clase obrera.
Sin embargo, y pese a Moyano, se abrió una nueva situación entre los trabajadores. Empezó a crecer la discusión política en fábricas, empresas, escuelas y reparticiones públicas. En Córdoba los obreros de VolksWagen fueron más allá. En esa provincia, la interna de la CGT combinada con la interna peronista alentó el llamado al paro en el SMATA, dando aire a los trabajadores y al Cuerpo de Delegados independiente de VW, que votaron en asamblea acompañar el paro con un corte de calle el mismo 27 en defensa de los puestos de trabajo de toda la industria automotriz (ver página 5).
A la izquierda clasista la situación abierta nos plantea avanzar de manera cualitativa y extendernos a importantes franjas de la clase trabajadora. Por eso planteamos la necesidad de impulsar una Asamblea Nacional Clasista que reúna a miles de delegados, activistas y trabajadores de todo el país, desde Jujuy a Tierra del Fuego, aportando a la construcción de una poderosa alternativa contra la burocracia sindical y por la independencia política de la clase trabajadora. Una propuesta que hacemos extensiva a los partidos con los que conformamos el Frente de Izquierda y de los Trabajadores.
En la Conferencia Nacional de Trabajadores que el PTS realizará el 8 de julio insistiremos en esta perspectiva. Nos preparamos para momentos duros de la lucha de clases. Los trabajadores tienen que hacer política, pero política a favor de sus propios intereses y no de los de los patrones. Con los "Gordos" o los "independientes" se termina detrás del gobierno de CFK. Con Moyano, detrás de Scioli u otro gobernador derechista. Con todos, en la interna del Frente Para la Victoria. Con la CTA de Yasky, también con el gobierno nacional. Con la CTA de Micheli con el FAP de Binner. Por eso en la Conferencia levantaremos un posicionamiento claro: luchar por construir un partido de trabajadores, sin patrones ni burócratas millonarios.
|
lunes, 2 de julio de 2012
EL ESCENARIO DESPUÉS DE LA PLAZA
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario