PAGINA/12: Acuerdo sobre el que no hay acuerdo

Acuerdo sobre el que no hay acuerdo


Por Adriana Meyer

La “paz social” alcanzada con el acuerdo del viernes en el Ministerio de Trabajo entre Kraft Foods y la mayoría de la comisión interna pende de un hilo. El contenido del acta firmada en la cartera laboral, que dos miembros de la interna se negaron a avalar, será analizado hoy por los trabajadores en una asamblea que se realizaría a las 13. Sin embargo, el delegado Javier Hermosilla dijo que “las asambleas del turno noche ratificaron lo que habían resuelto los despedidos y los no despedidos: rechazar el compromiso que asumieron los delegados que firmaron el acta de no realizar ninguna medida adentro y afuera de la planta”.

Según afirmó Hermosilla, la asamblea de la noche resolvió que “toda discusión sobre la situación de los despedidos debe hacerse en presencia de los propios despedidos porque nadie tiene derecho a impedirle a un compañero echado que luche por su puesto de trabajo”, y se mostró dispuesto a apoyar “toda medida que los 53 trabajadores despedidos realicen en su lucha por la reincorporación”. En realidad, esa cifra comenzó a disminuir porque algunos de los que quedaron afuera del acuerdo empezaron a volcar sus energías en conseguir “changas” para sobrevivir. Más allá del fondo de huelga y la solidaridad de los compañeros, otros expresaron su frustración por los términos en que se selló el acuerdo, y un puñado se está alejando porque se siente en el medio de una “interna” entre los delegados, que muy probablemente vayan divididos a la elección del 3 de noviembre. Con acusaciones cruzadas, el sector que responde a Ramón Bogado y el que sigue a Hermosilla se enfrentan porque el primero sostiene que hay que reagruparse y recuperar fuerzas antes de seguir en la lucha por los despedidos que quedan, mientras que el segundo considera que esa fuerza está intacta adentro y afuera de la fábrica, y que no hay razones para perder la iniciativa lograda en estos dos meses. “La mano cambió, si cortamos ahora la Panamericana nos van a reprimir”, argumenta Bogado. “Ellos están entregando la lucha”, replica Oscar Coria, del sector de Hermosilla.