El Argentino.com: La empresa Kraft se negó a continuar el diálogo y se profundiza el conflicto

La multinacional quiere comprar Cadbury en más de u$s17.000 M

La empresa Kraft se negó a continuar el diálogo y se profundiza el conflicto

11-09-2009 / La situación en Kraft es cada vez más compleja. La empresa no quiere dialogar, mantiene a policías apostados dentro de las instalaciones y ratificó los 155 despidos. Los trabajadores, en tanto, resistían dentro de la planta y realizaron cortes de ruta.

Sigue el conflicto en Kraft y los trabajadores cortaron ayer la Panamericana El conflicto en la fábrica alimentaria Kraft Foods, ex Terrabusi, se agrava con el correr de los días. Tras el vencimiento de la conciliación obligatoria se ratificaron los 155 despidos, las partes endurecieron sus posturas y, a pesar de las recomendaciones del Ministerio de Trabajo, no retomaron el diálogo.
Mientras tanto, la empresa norteamericana busca comprar la británica Cadbury en más de 17.000 millones de dólares.
En ese contexto, los empresarios aseguran que dejarán todo en manos de la Justicia y no propiciarán ningún encuentro para tratar de destrabar la situación que mantiene paralizada la planta de la localidad bonaerense de Pacheco, que sigue custodiada por efectivos de la Guardia de Infantería de la policía bonaerense.
En tanto, los trabajadores realizaban medidas de fuerza dentro y fuera de la empresa para reclamar la reincorporación de los cesanteados. Ayer hicieron dos cortes de tránsito en la Panamericana, que incluyó la quema de neumáticos. Los despedidos se mantienen en sus puestos de trabajo dentro de la fábrica.
El director de Asuntos Corporativos de Kraft Foods Argentina, Pedro López Matheu, indicó a Buenos Aires Económico que, por decisión de los empresarios “la planta no está produciendo, porque, a pesar de que los trabajadores ingresan a su turno, mientras estén los despedidos acá adentro no se puede producir”.
“Hasta ahora no hay ningún diálogo y lo que está funcionando es la instancia judicial, que por un lado es lo laboral (el pedido de desafuero de los despedidos que pertenezcan a la comisión interna o al sindicato), y por otro está actuando la fiscalía en la parte penal”, afirmó.
“Estamos abiertos al diálogo, lo que no podemos aceptar es la imposición de condiciones. La posición de la empresa es que con la finalización de la conciliación obligatoria, los despidos han quedado confirmados”, aseguró López Matheu.
Asimismo, expresó que “los despidos se realizaron por estos hechos de violencia e intimidación, que la empresa no va a tolerar y por eso se les iniciaron acciones en la Justicia. Los despedidos son 155 sobre una plantilla de 3.000 personas”. Eso incluye a una parte de la comisión gremial interna.
Por su parte, el delegado Ramón Bogado indicó a este diario que el miércoles a última hora se realizó una reunión en la que los empresarios ofrecieron a los cesanteados siete días de licencia en los hogares y después evaluar cada despido. El objetivo era que abandonen la fábrica.
“Nosotros no aceptamos eso porque no tenemos garantías. Si la empresa no cumplió con la conciliación obligatoria, menos van a respetar esto. Acá están todos los carros de asalto de la policía. Si nos vamos, nunca volveremos a entrar”, aseguró el gremialista. Además, los trabajadores reclamaron más intervención del Ministerio de Trabajo y cuestionaron al Sindicato de los Trabajadores de la Industria de la Alimentación, que encabeza Rodolfo Daer. “Los dirigentes se borraron”, se quejaron.

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